martes, 16 de noviembre de 2010

MESEKHNET

TERCERA PARTE


En tierras foráneas donde no se adoraban a los dioses Egipcios estaba Rashidi, quien era hijo de Nubi rey de Nubia, tierra de los Faraones Negros, quienes tenían la creencia que la posesión más preciada que ellos tenían era la de su propia alma.

Rashidi, guerrero y segundo en el clan; sucesor de Nubi, insiste a su padre para invadir Egipto pero su estrategia era entrar por el desierto del Sahara, por cierto era una caminata muy larga pero si llegaba a territorio Egipcio era muy probable que la victoria seria de los Nubianos puesto que sería un Ataque sorpresa y no habría defensa por parte de Egipto, La idea no le agrado del todo al Rey Nubi, le sugirió a Rashidi replantear su estrategia.

Pero el creía estar seguro de lo que proponía, así que se alista sin el consentimiento de su padre para cruzar  el Desierto del Sahara y llegar a Egipto pero no con la intención de guerra, sino con el ánimo de probar que sí se podía llegar con bien y regresar después de esta travesía, otro motivo era espiar por dentro a Egipto y saber a que se podía atener; joven e intrépido, se marcha sin el permiso correspondiente rumbo a Egipto en su caballo tan negro como el lévano, pero no imagino los peligros del desierto, enfrentó tormentas, tragó arena y seguía la ruta que se había trazado, pero el hermoso animal que lo acompañaba no soporto a las arenas movedizas y fue tragado por las mismas.

Sin fuerzas y rendido ante el indomable desierto cae sintiendo su mundo un fracaso, mas a lo lejos divisaba un oasis, pero sus fuerzas se perdían y solo un profundo oscuro invadió sus ojos.

Meskhnet lo vio y corrió a auxiliarlo, pero cuando lo vio quedo perpleja de ver a un hombre tan majestuoso, de piel morena y ojos esmeralda entonces le dio de beber agua y lo llevo al oasis para que pudiera recuperarse de tan larga travesía.

Cuando Rashidi aun inconsiente escucha una voz tan dulce, tan gloriosa que piensa q ya su alma esta entre los dioses, pero al abrir sus ojos y ver solo la mirada de su salvadora se enamora.

Meskhnet estaba aturdida e intranquila, nunca se había sentido así, tenia mariposas en el estomago se sentía nerviosa hasta al hablar, sentía que no era normal, pero aquel hombre la inquietaba demasiado, no era solo el físico, y la piel de tal contraste, era mas que eso, era amor.
Rasidi permaneció en le Oasis un día completo, Meskhnet le conto brevemente su historia y el por q no podía permanecer allí por mucho tiempo y que era mejor que siguiera su destino.

El claramente le dijo mi destino eres tu y regresare por ti.

Rashidi, emprende nuevamente su viaje a Egipto con la firme promesa de regresar y hacer la su esposa, ella jura esperarlo.

Mientras tanto Ra, decide visitar a su niña y contarle las buenas nuevas que estaban sucediendo, y que su boda estaba pactada para segunda luna nueva con Sobek.

Meskhnet se niega rotundamente a esto y provoca el enojo de Ra. Ya di mi palabra y tu te casaras quieras o no con Sobek de lo contrario atente a las consecuencias.

Mesekhnet para no levantar sospechas asienta la cabeza en post de resignación, para darle tiempo a su amado de q regrese en dos lunas.

Nuevamente las lagrimas se asemejan a su faz y cuenta al viento su fragilidad, este le responde cual murmullo que le daría el encargo a su amado y antes de dos lunas el debería sacarla del Oasis de Terketzi…...Continuará